Según ha informado Asaja en un comunicado, la campaña de 2014-1015 de este cítrico "vuelve a está marcada por los bajos precios en origen, y ya van cinco consecutivas, con precios de venta muy inferiores a los costes de producción".
En la nota, Asaja ha criticado que las grandes cadenas de distribución venden las naranjas en mallas de dos, tres o cinco kilos y amontonadas o aplastadas en cajones "con el único reclamo de su bajo precio".
Los agricultores han explicado que la marcha de la campaña de comercialización es muy "preocupante" ya que el kilo de naranja navelina, una de las variedades más cultivadas en Andalucía, se vende a la mitad de precio al que se vendía hace 24 años, ya que en 1991 se vendía a 19 céntimos y a día de hoy, a 8 o 9 céntimos, cuando el precio mínimo para cubrir los costes de cultivo está entre 17 y 20 céntimos.
En la nota, Asaja recuerda que ya en febrero de 2013 el presidente de Asaja-Andalucía, Ricardo Serra, presentó al entonces consejero andaluz de Agricultura, Luis Planas, un plan estratégico para este sector, cuya situación se ha agravado en el último año y en el que pese a que el aforo de naranjas es levemente inferior al de la pasada, el mercado ha tardado mucho en arrancar, y cuando lo ha hecho ha partido de unos precios ínfimos que no cubren los costes del cultivo.