Barato ha manifestado que la cumbre del cambio climático "no puede pasar desapercibida para el campo español o europeo", que estará muy atento y deberá cumplir las decisiones que salgan de dicha reunión.
Ha señalado que utilizar a la agricultura de forma política y culpabilizar al sector para contabilizar los gases de efecto invernadero "no es la solución", porque se trata de una actividad que respeta "religiosamente" los requisitos ambientales.
No obstante, ha apelado a la tranquilidad y ha señalado que la futura Política Agrícola Común (PAC) y la "información" a los productores serán fundamentales a la hora de emprender actuaciones en favor del clima.