Asaja de Castilla-La Mancha ha lamentado que mientras el precio del petróleo baja en un mes el 23,7 por ciento, los precios del gasóleo, de los transportes y de los fertilizantes permanece inamovible.
Asaja ha indicado que los agricultores no han visto descender los precios del carburante aunque el crudo registra un descenso y que además los precios de los fertilizantes se han duplicado en un año.
En este sentido, Asaja ha calificado como «catastrófico» el resultado en la renta del agricultor y un «funesto varapalo» para la agricultura en general, ya que a los 0,94 euros que llegan a pagar los agricultores castellanomanchegos por el gasóleo B hay que sumar el aumento de los precios de los piensos y de las nuevas tarifas eléctricas.