El consejero señaló antes de reunirse con los responsables de las organizaciones agrarias COAG, UPA, Asaja y cooperativas agroalimentarias, que «se han concedido unos derechos de agua superiores a los que realmente tiene capacidad la cuenca», por lo que ha instado a sus interlocutores a buscar soluciones.
Como alternativa, Sánchez de Haro ha propuesto un estudio de la situación de la cuenca para conocer su capacidad y reasignar según las necesidades de regadío de las provincias, y también ha apuntado a la búsqueda de fuentes alternativas como la regeneración de aguas para poderles dar un uso, «un reto en la situación de sequía que está provocando el cambio climático».
La situación de Córdoba es particular y la Mesa de Regadío en una reunión previa solicitó que la provincia reciba los 228 hectómetros cúbicos que ha cedido a otras provincias limítrofes.
Las organizaciones agrarias ya explicaron que Córdoba almacena el 50 por ciento del agua de la Cuenca, pero sólo recibe para sus cultivos un 16 por ciento, mientras que Sevilla cuenta con el 17 por ciento de agua y recibe el 42 por ciento, y Jaén tiene un 37 por ciento de volumen de la Cuenca y recibe el 40 por ciento para regadío.




















