Según el informe de Aforo completo, hecho público esta semana, "este año se ha registrado de nuevo un descenso" de la superficie destinada al cultivo de cítricos, la mayor parte de ellas en la provincia de Valencia y principalmente por el cultivo del caqui.
El Ejecutivo valenciano también destaca el aumento en Alicante de nuevas plantaciones de limoneros y la recuperación en la región de parcelas que antes se habían descuidado, en ambos casos "favorecidos por el precio registrado por este cultivo en las últimas campañas".
A pesar de este recorte de superficie citrícola, la Comunidad Valenciana prevé aumentar un 23,6 por ciento, hasta las 3.953.226 toneladas, la producción citrícola respecto a 2015/16, un porcentaje que se sitúa en el 0,7 por ciento si se compara con la campaña 2014/15.
La estadística agrícola de Superficies y Producciones 2015 de la Generalitat Valenciana fijaba en 80.466 hectáreas la superficie plantada de variedades de mandarino, frente a las 71,239 hectáreas dedicadas a naranjos, las 14.490 hectáreas de caquis y las 9.958 hectáreas de limoneros.
En el informe del primer aforo 2016/17 se constata un descenso medio de la superficie de mandarina del 1,1 por ciento, una reducción que es mayor en las provincias de Castellón y Valencia mientras que en Alicante aumenta la superficie; la variedad clemenules es la más afectada por el recorte.
En naranjas, desciende el número de árboles de variedades navel frente al aumento de las variedades nuevas como las valencia delta, midknight, chislett, powel, barnfield o M7.
