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Afrucat reivindica la migración y la fruta como binomio de integración social

Personas migrantes y el sector de la fruta como binomio y herramienta de integración social. Esta es la reivindicación que hace la Asociación Empresarial de Fruta de Cataluña, Afrucat, con el proyecto llamado "Casa de Todos, Vidas cambiadas por la fruta".

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Una miniserie de seis entrevistas breves a personas que hace años vinieron a trabajar a Lleida con el fin de mejorar su vida, y la de sus familias, desde orígenes tan diversos como Gambia, Colombia, Rumanía o Argelia. Marius Grigore, Jorge Ceanca, Jorge Armando Flores, Mahamadou Bah, Dramani Sowe y Kamel Aissiou son los protagonistas de estas seis conversaciones con la periodista Gina Raymat, en unos documentales que alternan imágenes de entrevista con otras de estas personas en su trabajo.

«Estas historias reales evidencian como la inmigración es riqueza, tanto para el trabajador recién llegado que busca trabajo y una vida mejor, como para el territorio que necesita de estas personas», explica el presidente de Afrucat, Francesc Torres. «Queríamos poner en valor la oportunidad de ascensor social que es el mundo de la fruta. Un sector muchas veces estigmatizado por casos aislados de explotación de personas vulnerables, y que el sector rechaza», explica el director general de Afrucat, Manel Simon.

Los documentales se presentarán hoy día 29 de julio, a partir de las 20h, en el Auditorio del Centro de Culturas y Cooperación Transfronteriza del Campus de Cappont de la Universidad de Lleida. El proyecto «Casa de Todos, Vidas cambiadas por la fruta» cuenta con la colaboración de la Diputación de Lleida y del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Cataluña. El acto de presentación estará presidido por Violant Cervera, consejera de Derechos Sociales de la Generalitat de Cataluña.

«Casa de Todos, Vidas cambiadas por la fruta»

 El proyecto lo forman seis microvídeos que enseñan, a través del formato de entrevista, las historias vitales de seis inmigrantes: dos rumanos, dos gambianos, un colombiano y un argelino, que vinieron a tierras leridanas para mejorar su vida; un objetivo que han conseguido gracias al sector de la fruta que ha sido el vínculo común que les ha arraigado a Ponent.

Marius Grigore, Jorge Ceanca, Jorge Armando Flores, Mahamadou Bah, Dramani Sowe y Kamel Aissiou son los protagonistas de «Casa de Todos, Vidas cambiadas por la fruta». En los microvídeos explican sus vivencias que, aunque son diferentes y únicas, tienen como común denominador la voluntad y, a veces, la necesidad de transformar su vida para mejorar la calidad o para poder tener un futuro para ellos y sus familias. Un futuro que ya es presente, porque el trabajo en el sector frutícola les ha abierto la puerta de la integración social que han logrado con su esfuerzo y con la ayuda y colaboración de las empresas fruteras donde trabajan.

 Los protagonistas

Marius Grigore (Rumanía, 53 años)

Nacido en la localidad de Slanic Prahova, trabaja en Lleida desde hace diecinueve años. A pesar de tener diferentes trabajos en su país, no tenía suficiente dinero para subsistir y, sobre todo, para asumir una compleja intervención de salud que debía hacerle a su hija que sufre una discapacidad. Aquí podía ganar más dinero y más deprisa. Trabaja en Corinsa Frutaria (Alcoletge).

Jorge Ceanca (Rumanía, 43 años)

Nació en Moldavia. Hace dieciséis años que trabaja en el sector de la fruta. Comenzó cosechando fruta en Alcarràs, Puigverd de Lleida y Artesa de Lleida para continuar trabajando en Corinsa Frutaria donde, tras pasar por diferentes tipos de trabajos, forma parte actualmente del equipo de mantenimiento de la planta de Alcoletge. Casi toda su familia (mujer, hija y yerno), trabajan en la misma empresa. Su hijo pequeño es alumno del IES Caparrella.

Jorge Armando Flores (Colombia, 41 años)

En su país era artesano de madera y cerámica, pero no ganaba lo suficiente para vivir como es debido. Llegó con un primo suyo para trabajar en la campaña de la fruta y ya no se ha ido. Los primeros años venía sólo para la temporada de verano, primero en Huelva para la recogida de la fresa. Después vino a Aitona donde trabajó en la cooperativa y luego en Albatàrrec, donde se quedó para trabajar en Baró i Fills. Su hijo ha seguido sus pasos y acaba de incorporarse a trabajar en la misma empresa.

Mahamadou Bah (Gambia, 39 años)

Hace quince años que trabaja en el sector leridano de la fruta. Era campesino en su país, pero la necesidad de mejorar sus condiciones de vida lo llevaron a Torrelameu. En este municipio tuvo la suerte de conocer en Francesc Torres que le garantizó poder iniciar una nueva vida. Su patrón le ayudó desde el primer día a conseguir papeles, trabajo y vivienda y, con el paso de los años, se han convertido en personas imprescindibles, el uno para el otro.

Dramani Sowe (Gambia, 37 años)

Lleva trece años en Lleida, siete de ellos en Torrelameu. Hacía trabajos del campo en su país de origen y este ha sido el aval que le ha permitido alcanzar cada vez mayor responsabilidad en la explotación donde trabaja con la supervisión del Joan Miquel. Las ganas de aprender y mejorar, y con la ayuda y acompañamiento de sus encargados, ha aprendido a leer y escribir, cuestión que ha sido imprescindible para seguir formándose y evolucionar en su trabajo.

Kamel Aissiou (Argelia, 60 años)

Llegó hace treinta años a Torre-serona donde comenzó a trabajar para la familia Massot. Muy pronto la complicidad entre ellos fue más que laboral. La confianza mutua y el paso de los años han hecho que Kamel se haya convertido en la mano derecha de los responsables de la finca. Es el trabajador más veterano que tienen y es quien se encarga de la coordinación y gestión de muchas de las tareas y responsabilidades diarias. Dos de sus tres hijos han nacido en Lleida. Los grandes han finalizado su formación universitaria y el más joven estudia bachillerato en Lleida.

Aquí tienes el vídeo: