En términos de valor, los españoles gastaron en 2011 en fruta fresca el 1,3 % menos que en 2010, con 6.178 millones de euros.
También el gasto en hortalizas y patatas frescas descendió en 2011, con el 2,1 % menos que en el ejercicio anterior con 5.193 millones de euros.
El consumo per cápita para las frutas frescas se situó en 101,46 kilos, mientras que para las hortalizas fue de 85,38 kilos.
En el mes de diciembre, el consumo de frutas frescas sumó 353,2 millones de kilos, el 6,7 % más con respecto al mismo mes de 2010.
Para las hortalizas y patatas frescas, el crecimiento fue similar, del 6,6 %, con un total de 289,5 millones de kilos.
El gasto en el último mes del año aumentó para las frutas, con el 3,8 % más que en diciembre de 2010, hasta los 451,7 millones de euros.
Por el contrario, para las hortalizas el valor experimentó una caída del 3,5 %, hasta los 376,6 millones de euros.
Por su parte, el consumo de patatas registró descensos, tanto en fresco, del 3,7 % hasta 1.033 millones de kilos, como en congeladas y procesadas, con respectivas caídas del 0,9 % y el 5,1 %.
En términos de valor, sin embargo, el gasto en patatas frescas subió el 0,7 % en el citado periodo, con 696,5 millones de euros, al igual que en las congeladas, con el 4,9 % más, pero a diferencia de las procesadas, con un 0,7 % menos.
El tomate fue uno de los productos hortofrutícolas que experimentó un mayor aumento en el consumo en 2011, del 7,9 % hasta los 700 millones de kilos, mientras que en valor cayó el 6,6 %, con un total de 902,7 millones de euros.
Entre las frutas, el consumo de cítricos bajó el 1,2 %, hasta los 1.326 millones de kilos, un descenso que en términos de valor llegó al 9,7 %, con un gasto de 1.351 millones de euros.
En el capítulo de alzas en el consumo destacan las de las cerezas (del 20,4 %, con 72 millones de kilos), uvas (el 6,5 %, más hasta los 110 millones de kilos) y fresas (del 4 %, hasta los 115 millones de kilos).
Desde la Federación Española de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex) se ha subrayado la «ligera mejoría» que muestran los datos de consumo en el cuarto trimestre, así como la estabilización mantenida en todo el año, que refleja «que la demanda interna se ha mantenido a pesar de la crisis, impulsada por los bajos precios».






















