En un comunicado, la organización ha subrayado la necesidad de «seguir trabajando y sumando esfuerzos» para lograr que el acuerdo no sea ratificado en la votación prevista en el Pleno del Parlamento Europeo el 15 de febrero.
Hortyfruta ha insistido en que es «frustrante que la Comisión de Comercio haga oídos sordos a las reivindicaciones del sector hortofrutícola andaluz, español y comunitario, que está viendo comprometido su economía, su empleo y, en definitiva su futuro».
No obstante, ha destacado que el resultado de la votación de ayer no es vinculante, por lo que ha apostado por trabajar para que el acuerdo no sea ratificado de forma definitiva en el Pleno.
Hortyfruta ha insistido en las «graves consecuencias» que tendría la ratificación del nuevo acuerdo, ya que el que está en vigor «ha provocado la destrucción de 12.500 empleos en el último año».
Según la Interprofesional, «por cada mil toneladas de tomate que se deja de exportar se pierden 50 empleos en las zonas de producción».
Esta situación «se trasladará a corto plazo a otras producciones hortofrutícolas», puesto que en el nuevo protocolo se prevé la «práctica liberalización no sólo en hortalizas, sino también en frutas», ha advertido.