Alexander Müller, subdirector general de la FAO, ha declarado que el calentamiento del planeta obliga a encontrar formas para mejorar la capacidad de adaptación de la gente y de los sistemas de producción alimentaria, además de intentar frenarlo en lo posible reduciendo las emisiones. Müller intervino en un seminario sobre Planificación y estrategias de adaptación donde ha expuesto que en esta reducción tiene mucho que ver el sector agrario, ya que el 18 por ciento de las emisiones de gases efectos invernadero a nivel mundial provienen de este sector, mientras que el 18 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono son culpa de la deforestación, otra práctica asociada a explotaciones extensivas agrícolas. Igualmente, la producción arrocera produce entre 50 y 100 millones de toneladas por año, siendo un cultivo especialmente sensible al cambio climático, con la peligrosidad adiciona de que da de comer a la mitad de la población del planeta. Müller afirmó que los países industrializados podrían aumentar su potencial de producción a corto plazo gracias al aumento de entre 1 y 3 grados de la temperatura mundial, aunque precisando que este mismo incremento será perjudicial para latitudes más meridionales, en las que predomina la agricultura de subsistencia, donde descendería notablemente la producción.
Nacional Sep 2007