La apertura de estos dos nuevos establecimientos supone una inversión de 8,1 millones de euros y en su construcción han participado un total de 40 proveedores que han dado trabajo a 140 personas durante la fase de obras, ha informado Mercadona en un comunicado.
Estas aperturas forman parte del plan inversor que la compañía de supermercados tiene previsto llevar a cabo en Cataluña y que está dotado de 140 millones de euros.
Además de garantizar la plantilla existente de 86 personas, Mercadona ha generado siete puestos de trabajo más entre ambos supermercados.
El nuevo modelo de tienda eficiente presenta mejoras y ofrece novedades en todas sus secciones, como una nueva charcutería con jamón al corte y envasado, un servicio de zumo de naranja recién exprimido, una góndola central en la perfumería, especialidades en sushi, una nueva sección de panadería con máquina para cortar el pan y pastelería refrigerada o una nueva exposición en la pescadería para los productos con concha.
También incorpora la sección «a punto para comer», que ofrece un total de 35 platos preparados para llevar.
En lo que respecta al aspecto medioambiental, las nuevas tiendas reducen un 40 % el consumo energético en comparación con el modelo de tienda tradicional.
La inversión de Mercadona en Cataluña se destina a la apertura de seis tiendas, cinco de las cuales son aperturas por cierre de otros establecimientos que no se adaptan a los estándares de calidad, y también se reformarán otras 21 tiendas para adaptarlas al nuevo modelo eficiente.