La directora de esta feria de los productos ecológicos y del consumo responsable, Ángeles Parra, ha explicado que «a pesar de la crisis, el sector ecológico sigue creciendo y BioCultura tiene que estar a la altura y ser motor de este sector en evolución».
La feria -que se celebra hasta el domingo en Madrid- pretende convertirse, además, en un referente internacional de los productos biológicos del sur de Europa, ha apuntado.
España, que ya ocupa el primer lugar de la Unión Europa con 1,6 millones de hectáreas dedicadas a la producción biológica, exporta la mayor parte de los alimentos ecológicos, por lo que es lógico pensar en atraer a los compradores internacionales y «venderles» en el país, ha puntualizado.
«Los productos españoles son muy demandados en el exterior», ha asegurado Parra, por lo que «una de nuestras prioridades sea el internacionalizar la feria, además de aumentar el consumo interno aún muy bajo».
En este sentido, ha recordado que en España los españoles apenas se gastaron 19,4 euros por habitante y año en 2010, muy lejos aún de los 71 euros de los alemanes.
Parra ha señalado que hay que potenciar este aspecto, en apariencia negativo, ya que existe un gran potencial del mercado nacional porque «a pesar de la crisis, el sector ecológico no se ha resentido».
No obstante, ha reconocido que las empresas del sector pasan por las mismas dificultades que el resto en lo relativo a la financiación de los bancos, que frena su desarrollo.
La directora de BioCultura ha insistido en el gran potencial de crecimiento que tiene este sector, aunque debe mejorar la distribución y sus estructuras internas.
La producción ecológica es «un sector de inversión clarísima y con gran futuro» en el mercado nacional y en el de exportación, ha puntualizado.