Así se recoge en una nota sectorial sobre el mercado de verduras congeladas en Egipto 2011 del ICEX en el que este organismo resalta que la expansión demográfica egipcia, cuya base de crecimiento se sitúa alrededor del 2 % anual, ejerce un fuerte efecto arrastre sobre la demanda de alimentos.
Explica, además, que todo ello, unido a la juventud de la población, plantea un escenario de desarrollo del mercado potencial en un marco ya de por sí atractivo, con sus más de 80 millones de habitantes en la actualidad.
No obstante, precisa que Egipto es un gran fabricante de productos agrícolas y alimentos, por lo que la competencia local en el sector de verduras congeladas es elevada.
«El saldo comercial del país en este sector es positivo ya que el volumen de importaciones es todavía reducido en relación al volumen de las exportaciones», subraya el ICEX.
Aclara que estas importaciones se basan en cubrir necesidades puntuales de un determinado producto, bien por déficit en la producción o por la búsqueda de mejor calidad en otros mercados.
Asimismo, también subraya que el volumen de las importaciones egipcias está creciendo sustancialmente en los últimos años y que se ha diversificado «en gran medida» su procedencia, con un «gran protagonismo» los productos europeos en los últimos ejercicios.
En cuanto a los aranceles, esta nota sectorial recoge que la tasa para verduras congeladas procedentes de la Unión Europea (UE) se sitúa en el 0 %, lo que hace «muy atractiva» la exportación hacia este país.
Sin embargo, la apreciación del euro frente al dólar y el tipo de cambio con la libra egipcia -cada vez más desfavorable para el comprador local- provoca una pérdida de competitividad de los productos españoles y europeos.
Asegura que la calidad del producto español está reconocida en ese país, lo que provoca que «el principal problema para la exportación recaiga en el precio».
Por todo ello, apunta que los productos locales «tienen precios muy asequibles y eso puede lastrar la potencial competitividad de los productos españoles en este mercado».
En general, sostiene que las empresas productoras egipcias de verduras congeladas solo importan productos en los que hay déficit de producción local, bien por una mala cosecha o por que no hay suficientes cultivos de ese tipo en el país.
Añade que, en concreto, cumplen esta premisa los guisantes, que constituyen el principal producto importado por dichas empresas, al no ser suficiente la producción local para abastecer a la totalidad de la demanda.