pistacho-castilla-leon-0218
Nacional

Pistachos por patatas en Castilla y León

En los tres últimos años, el cultivo del pistacho ha pasado de 450 a 1.700 hectáreas, mientras que otros frutos también han incrementado la zona de producción aunque no de manera tan importante ya que el almendro ha pasado de 1.300 a 2.600 hectáreas, el nogal de 300 a 460 o el avellano de 2 a 5 hectáreas.

El pistacho se ha afianzado como el cultivo alternativo leñoso con mayor crecimiento en Castilla y León, al triplicar su superficie en los últimos años en la comunidad autónoma debido a la estabilidad en las cosechas, los precios de ese fruto seco y las condiciones climatológicas que requiere. Los productores se cansan de los precios bajos de la patata y de la zanahoria.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León, Jesús Julio Carnero, que este viernes ha visitado la cooperativa de pistacheros Naturduero y ha asistido a la recogida del fruto en la parcela de uno de sus socios ha puesto de relieve el apoyo del Gobierno regional a ese fruto seco.

Ha detallado que en los tres últimos años el cultivo del pistacho se ha multiplicado por 3,5 hasta alcanzar las 1.700 hectáreas en Castilla y León, de las que un 20 por ciento están ya en producción, ya que el árbol requiere siete años de crecimiento antes de que comience a dar fruto.

El mapa autonómico del pistacho refleja que Valladolid cuenta con 623 hectáreas del cultivo, Zamora 545, Segovia 130, Salamanca 127, Ávila 110, Burgos 66, Palencia 65, Soria 21 y León 2. Pero lo más importante no es el hoy, sino el mañana, ya que muchos productores están pensando en abandonar la patata, que requiere mucha agua y mucho trabajo, por este fruto seco que no requiere ni trabajo ni tanta agua.

Se trata del cultivo alternativo leñoso que más ha crecido y que aún tiene recorrido ya que España es un país importador de pistachos y en la Unión Europea también existe un déficit de producción, según ha puesto de relieve.

En los tres últimos años, el cultivo del pistacho ha pasado de 450 a 1.700 hectáreas, mientras que otros frutos también han incrementado la zona de producción aunque no de manera tan importante ya que el almendro ha pasado de 1.300 a 2.600 hectáreas, el nogal de 300 a 460 o el avellano de 2 a 5 hectáreas.

Jesús Julio Carnero ha explicado que el pistacho se aviene bien a las condiciones climatológicas de la comunidad autónoma y a las consecuencias que en ellas puede tener el cambio climático, motivo por el que la Junta apuesta por él.

También ha subrayado la importancia de las cooperativas, como la de pistacheros que ha visitado, por ser ejemplo de la agricultura que necesita Castilla y León. La cooperativa Naturduero, integrada por 45 socios, suma unas 300 hectáreas de cultivo en las provincias de Zamora, Valladolid y Salamanca, según ha detallado uno de sus socios, el secretario general de UPA en Castilla y León, Aurelio González.

Cada árbol puede producir hasta siete kilos de pistachos y la cooperativa logró el pasado año vender toda su producción a una empresa madrileña y un precio de ocho euros el kilo.