La Unió ha calificado hoy, en un comunicado, que el 2009 ha sido «horrible para los intereses de los agricultores y ganaderos de la Comunitat Valenciana como consecuencia de la crisis de precios» y ha anunciado movilizaciones para 2010.
Para esa organización, en 2009 se han repetido «la tónica de los anteriores: los elevados márgenes comerciales entre origen y destino que siguen sin ser tenidos en cuenta por las Administraciones Públicas».
En ese sentido han indicado que el Observatorio de Precios estatal no cumple con su función y el autonómico ni tan siquiera funciona».
Además, también destacado como causas negativas el continuo retraso en el pago de las ayudas agrarias o el creciente aumento de las importaciones que hace que la preferencia comunitaria sea ya una mera anécdota y que se verá agraviado con el nuevo acuerdo firmado entre la UE y Marruecos.
Según La Unió, los precios bajos «se han dado en la totalidad de sectores agropecuarios» y, concretamente, en cítricos la campaña 2008-2009 «ha sido muy negativa pues los resultados de la misma son de unas pérdidas de más de 480 millones de euros frente a la pasada».
Pero también han subrayado la «falta de respuesta (de las administraciones) ante la sucesión de adversidades climatológicas pues de las promesas iniciales se pasa a hechos que tardan mucho en concretarse o ni tan siquiera eso, las progresivas restricciones en el uso de fitosanitarios sin alternativas o los continuos robos de cosechas y herramientas esenciales para la actividad agraria como por ejemplo los que se suceden en los pozos de riego».
Las modificaciones fiscales aprobadas por el Gobierno «tampoco son suficientes para frenar la crisis del campo valenciano», han hecho hincapié en ese comunicado en el que han puesto de relieve que en su opinión «existen muchos olvidos e incluso en algunos cultivos se han quedado por debajo de las expectativas, algo que provoca que la mayor parte de agricultores y ganaderos de la Comunitat Valenciana paguen impuestos sobre pérdidas».
La «situación de crisis augura un 2010 con movilizaciones para exigir el mismo trato hacia el sector agrario que el que se le proporciona a otros sectores económicos».
La Unió ha argumentado que el sector agrario valenciano, «además de crear riqueza económica con la producción de alimentos sanos y de calidad, es importante socialmente pues vertebra el territorio, mantiene el paisaje y fija a la población en las zonas rurales».