La cadena líder de la distribución croata, Konzum, está pasando por unos momentos especialmente delicados, ya que está a punto de entrar en suspensión de pagos. De hecho, sólo un aval político del Gobierno de Croacia está permitiendo que siga operando con cierta normalidad, pero retrasando el pago a los proveedores.
El nuevo director general del grupo Agrokor, propiedad de la cadena Konzum -más de 700 tiendas en Croacia-, Ante Ramljak, enviaba un mensaje de tranquilidad a los empleados y a los proveedores, ya que en breves semanas se retomará el pago de nóminas y a los proveedores, gracias a la mediación del Ministerio de Economía de Croacia.
Un representante del Ministerio de Economía de Croacia, Marica Vidákovic, ha instado a los funcionarios y a los croatas a que «compren sólo en Konzum» con la idea de salvar esta cadena de supermercados de capital croata.
La reacción en contra de las cadenas no croatas no ha tardado.
El Gobierno croata ha pedido a su población que compren sólo en las tiendas de Konzum para mejorar su situación financiera y pueda hacer frente al pago de sus deudas con trabajadores y proveedores. Konzum es la cadena líder en Croacia con sus 700 tiendas y con una cuota de mercado superior al 20%. La reacción de las cadenas internacionales no se ha hecho esperar, aunque utilizando un tono diplomático.
Lidl y Spar han usado la mano izquierda para comentar las declaraciones del representante del Gobierno de Croacia con respecto a la petición de que los funcionarios y croatas compren en Konzum. El representante de Spar, Nives Fett, señala que «actualmente estamos muy ocupados con la compra de las tiendas Billa», y recuerda que su empresa «nunca ha tenido problema alguno con sus proveedores y siempre les hemos pagado».
El portavoz de Spar hace una comparación nacional al señalar que «ningún austriaco de bien entendería que mi empresa no pagase a sus proveedores».
Desde Kaufland se lanza un mensaje más interno al afirmar que «continuaremos intentando mejorar el servicio a nuestra clientela en el punto de venta con las mejores condiciones posibles para seguir aumentando nuestras necesidades y representatividad».
Lidl guarda silencio y espera acontecimientos.
