Junto a la estabilización de volúmenes prevista para 2017, las previsiones de España, Italia y Francia para esta campaña también pasan por un buen escalonamiento de la producción y una mejor calidad de la fresa como resultado de la renovación varietal acometida.
España, según Freshuelva, producirá el mismo volumen este año pese a haber reducido la superficie dedicada a la fresa de las 5.800 hectáreas de 2016 a 5.400 hectáreas, un descenso que responde a la diversificación de cultivos de la zona, donde también se producen frutos rojos.