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Murcia defiende la calidad y seguridad alimentaria de los productos de la región

El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, y la titular de Sanidad, María Ángeles Palacios, han asistido a la presentación de los resultados del informe “Hábitos alimenticios de los españoles”, elaborado por el Foro Interalimentario, que recoge las preferencias y gustos de los murcianos en las prácticas alimenticias.

Los datos que se desprenden de este estudio, que fueron presentados por los coordinadores del trabajo, Ramón Calbet, presidente del Foro Interalimentario, y Daniel Ramón, miembro del Comité Científico, revelan que las frutas y verduras ocupan el segundo puesto entre los productos más consumidos por la sociedad murciana, mientras que el de pescado se encuentra por debajo de la media nacional.

Además, este informe señala que la dieta de los murcianos incluye en primer lugar leche y productos lácteos, seguido de fruta y verdura, carne, pasta, arroz y patatas, pescado, y por último, huevos y azúcares.

En referencia a las conclusiones extraídas de este informe, que revela además que los murcianos se sitúan por encima de la media española en el consumo de frutas y verduras, el responsable de Agricultura afirmó que “el sector agroalimentario es el primer eslabón de una dieta saludable”.

Cerdá explicó que la actividad agrícola constituye “un medio de vida” por su “vinculación a la sociedad y al medio ambiente”, y destacó “los beneficios nutricionales y saludables” de los alimentos producidos bajo las prácticas agrícolas, para “el fomento de una alimentación responsable y una dieta equilibrada”, aseguró.

Cerdá resaltó “la importancia de la agricultura en la cadena alimentaria”, por “la diversidad de funciones que aporta”, así como “el papel que desempeña el agricultor”, del que dijo, “es el punto de partida y la base de nuestro autoabastecimiento, porque es el que llena la despensa de nuestras casas”.

Productos sanos y seguros

En este sentido, recordó que “los agricultores murcianos optimizan el empleo de unas técnicas limpias y seguras que conservan los aportes nutricionales y vitaminas propias de los alimentos”, sometidas “a unos estrictos parámetros de calidad”, señaló.