Porque «evitar que la Xylella fastidiosa se disperse fuera de las Islas Baleares es responsabilidad de todos», según dijo la consellera del ramo, Elena Cebrián. Según un comunicado de la Generalitat, Cebrián pide la colaboración ciudadana para impedir la introducción en la Península de esta bacteria peligrosa para muchos vegetales.
Además, está prohibido el transporte, incluido el equipaje personal, de plantas y material vegetal de especies portadoras de esta bacteria. La conselleria puso en marcha en julio de 2016 el plan de contingencia contra la bacteria Xylella, de acuerdo con el ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y con otras comunidades autónomas.
Cebrián explicó que se han incrementado las medidas de control y prospección, así como las instalaciones vigiladas para evitar su introducción en la Comunitat Valenciana.
La consellera destaca la relación con las otras autonomías para contener la expansión de la bacteria, así como la buena coordinación, desde un primer momento, entre comunidades autónomas y el ministerio para llevar a cabo el plan de contingencia.
