La campaña de kiwi de Grecia se cierra con cifras nefastas y con un producto de menor calibre con respecto a ejercicios anteriores. El caudal de oferta se ha visto reducido en un 50 por ciento y el calibre de los frutos se ha situado «muy por debajo de lo normal», indican desde la firma Protofanousi Fruits.
Los productores de kiwi de Grecia no han podido responder desde finales de enero a la demanda de los supermercados europeos y los italianos han sido los grandes beneficiados de esta situación, hasta el punto de que vendieron sus kiwis por encima del euro, cuando lo normal es venderlo entre 0,80-0,90 euros/kilo.
La falta de calibres y de producción en Grecia se debió a la fresca primavera de 2007, que ha condicionado la calidad del fruto griego y su volumen de producción.
La falta de calidad y competitividad del kiwi griego obligó a los productores de Grecia a mirar a partir de febrero a los mercados del Este de Europa, menos exigentes en cuanto a cantidades y calidades, aunque a un precio muy económico.
Grecia ha incrementado las exportaciones de kiwi a destinos como República Checa, Eslovaquia, Rusia, Rumania y Bulgaria.