El seguro permitirá la protección de amplias extensiones del territorio que tiene altos riesgos de inundación y atender las afectaciones por fenómenos como La Niña y el Niño.
Pineda explicó que hasta el momento hay "140.000 campesinos registrados" y se espera que "al finalizar el año esa cifra aumente a 180.000".
"En realidad lo que vamos a hacer es un piloto en el cual resultarán las recomendaciones que darán lugar a la política, estamos todavía en una fase pre-operativa en un proceso de estudios de cambio", afirmó el presidente de la Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda), José Botero.
Agregó que a pesar de que la cobertura será por regiones "cada campesino tendrá su registro del seguro".
El Banco Mundial será la entidad que propondrá el modelo más idóneo para el aseguramiento catastrófico.
La iniciativa busca complementar la política actual de gestión de riesgos del campo basada en incentivos al seguro agropecuario.
Esta estrategia se ha implementado en México y Perú, logrando que en el país Azteca se aseguren diez millones de hectáreas que equivalen al 46 % del total de áreas sembradas, mientras que los peruanos tendrán una cobertura del 13 % de hectáreas.
En Colombia, se pasó de asegurar 31.000 hectáreas en 2009 a 187.000 en 2015, para ese año el valor de inversiones de seguro para el sector fue de 997.000 millones de pesos (unos 324,4 millones de dólares).
