De esta forma, según informaron a Efe desde la Asociación de Productores y Exportadores de la Fresa de Huelva (Freshuelva), el sector está tendiendo a plantar estas variedades, propias de la provincia onubense, que para la presente campaña ampliarán su presencia respecto a la anterior.
Las más asentadas son la ‘Primoris’ y la ‘Antilla’, que llevan ya años siendo objeto de plantación por parte de los agricultores; este año se suma una nueva ‘Rociera’ a la que se le va a hacer un seguimiento después de que el año pasado se llevaran a cabo ensayos con resultados "bastante buenos".
Desde Freshuelva se considera necesarios seguir apostando en esta línea de potenciar las variedades de la tierra, propias de Huelva, no sólo ya por su calidad y buen rendimiento sino por que "serán las primeras variedades que podrían entrar en la Indicación Geográfica Protegida (IGP) que el sector pretende conseguir para aumentar el valor añadido de sus productos y dar respuesta a las demandas de los consumidores".
Para la presente campaña se estima que se vuelva a reducir la superficie destinada al cultivo de la fresa como ya ocurriera el año pasado, cuando el descenso se cifró en 8,7 por ciento, al pasar de 6.400 a 5.860 hectáreas.
Este descenso, como desde Freshuelva se prevé ocurra este año, es fruto de la apuesta por la diversificación que están haciendo los agricultores hacia otros frutos rojos como frambuesas o arándanos.