De las 2.921 solicitudes presentadas en Andalucía para optar a las ayudas a la incorporación de jóvenes agricultores, se han aprobado 1.492, por lo que, según Asaja, "sólo el 50 por ciento de todas las presentadas ha llegado a buen fin, a pesar del compromiso de la Junta de atender a todos los jóvenes que cumpliesen con los requisitos establecidos".
Ocho meses después de la finalización del plazo de solicitudes para la incorporación de jóvenes, cuya convocatoria se hizo esperar tras la presentación de consecutivos borradores y cambios normativos, finalmente la Consejería de Agricultura publicó su resolución el pasado lunes, ha censurado.
Aún reconociendo el esfuerzo presupuestario de la Junta para esta convocatoria, Asaja ha denunciado que sólo la mitad de las solicitudes presentadas "haya llegado a buen fin" y cree que un "gran número de solicitudes denegadas lo han sido por errores o defectos subsanables y más por cuestiones formales que de fondo".
A este respecto, considera "sangrante" que en torno al 35 por ciento de las solicitudes desestimadas queden fuera por un requisito formal sobre el compromiso de la acreditación de la capacitación profesional, "a pesar de que queda aportado en cada solicitud individual el compromiso de adquisición de dicha capacitación en los dos años siguientes a la instalación del joven, como exige la normativa".
Según esta organización, se han denegado muchas solicitudes y en muchos casos son "bastante interpretables".
Para la siguiente convocatoria de ayudas, Asaja solicitará que se dé prioridad a los expedientes que han participado en la convocatoria 2015 y que no han obtenido una resolución favorable "por formalismos absurdos o por falta de presupuesto".
El 70 por ciento de los titulares de las explotaciones agrarias andaluzas tienen más de 50 años y el 35 por ciento sobrepasan los 65 años, y apenas el 9,4 por ciento tienen menos de 40 años.