Miembros del equipo de robos en el campo sorprendieron a uno de los detenidos mientras intentaba vender la naranja sustraída en un almacén de compra venta de cítricos en Alcácer.
Los agentes detectaron que las variedades de naranjas que pretendía vender eran Valencias y Navel Power, empleadas normalmente para su comercialización como naranja de mesa.
También comprobaron que esta persona presentó datos falsificados cuya procedencia indicaba ser de Cullera, pero en realidad era procedente de un robo en un campo de Picassent.
El total de kilos sustraídos asciende a 56.000 kilos de naranjas, aunque fueron recuperados más de 1.000, que pudieron ser devueltos a sus legítimos propietarios.
Las diligencias instruidas han sido entregadas a los decanatos de los juzgados de Torrent y Picassent.