Tras dos años de veto ruso a las exportaciones hortofrutícolas, en esta cita se ha debatido la apertura de nuevos mercados para los productores italianos, franceses y españoles como alternativa a Rusia, con los países del Sudeste asiático y de Extremo Oriente como principales áreas potenciales.
Sin embargo, se ha concluido que las medidas excepcionales de apoyo a los productores "siguen siendo necesarias", pues las perturbaciones en los mercados originadas por el embargo continúan y "la reorientación de las exportaciones a otros destinos es complicada y requiere tiempo", ha añadido el Departamento.
Han analizado las cuestiones fitosanitarias, que "cobran cada vez más importancia en este Comité" y se ha formalizado una reunión anual entre las administraciones y profesionales de los tres países, que también se ha celebrado esta misma mañana.
En este encuentro se han abordado los desafíos que tiene que afrontar el sector en la lucha contra las plagas y enfermedades vegetales, así como las respuestas a este reto.
Este Comité, que volverá a reunirse la próxima primavera en Italia, ha estudiado la situación de los mercados de diferentes productos como el tomate, la fresa, el ajo, los melocotones y nectarinas y las manzanas y peras, además de los cítricos.
