En una nota de prensa, la organización ha alertado de que se están produciendo situaciones de auténtico "desatino" debido a las inspecciones de estos equipos, que para finales de noviembre tienen que haberse revisado al menos una vez, y la aplicación de una norma que consideran "alejada del mundo agrario".
Para APAG Extremadura ASAJA, las ITEAF, que pretenden garantizar que los equipos reúnan las condiciones necesarias con el fin de evitar efectos nocivos para las personas y el medio ambiente, han supuesto "un impedimento para el normal desarrollo de la actividad agraria".
Ha añadido que las revisiones que realizan las empresas homologadas son tan exhaustivas que rozan lo "absurdo" ya que incluso declaran como "no aptos materiales nuevos que acaban de salir de fábrica".
En este sentido, ha transmitido la problemática del sector al Ministerio de Agricultura mediante un escrito para que "de forma inmediata" ponga en orden esta situación "exagerada e inaceptable", sin renunciar a los objetivos planteados por el Real Decreto.
Además, la organización ha recomendado al Ministerio que "saque a los técnicos de sus despachos para que paseen por el campo" y hablen con agricultores y ganaderos, y así comprobar de primera mano dichos problemas.