El consumo de arándano, frambuesa y moras frescas crecerá un 7 por ciento anual en los próximos cinco años, anotó el grupo, mientras que la ingesta de fresa podría aumentar casi un 2 por ciento. Las principales cadenas minoristas de alimentación europeas requieren de una gama completa de productos y frutas frescas a lo largo de todo el año.
Las continuas inversiones en nuevas variedades y los métodos eficientes de producción sostenible son también indispensables en el sector del Berry, por lo que una mayor promoción de estos pequeños frutos, mayor calidad y eficacia en la cadena de suministro podría reducir el precio en el canal minorista al mismo tiempo que impulsar aún más la demanda de los berries frescos en la Unión Europea, publica fruitnet.com.
La demanda del arándano de calidad está creciendo de forma exponencial, impulsando tanto las importaciones como la producción local en la zona comunitaria. La introducción de nuevas variedades y mejoras varietales son factores importantes para el mercado de la zona euro que fomentaría aún más su consumo.