Simone Baroke, analista de Euromonitor, destaca que a pesar de que el Parlamento Europeo ha concedido una cantidad extra de 20 millones de euros anuales para promover la alimentación saludable entre los niños, la ingesta de frutas y verduras en Europa ha experimentado un descenso, publica fruitnet.com.
En el este de Europa el volumen per cápita de frutas frescas se desplomó un 20 por ciento y el de frutas frescas un 4 por ciento. Entre los mercados de la Unión Europea que cuentan con un descenso más pronunciado en el volumen per cápita de frutas y hortalizas frescas son Italia, España y Reino Unido, destaca Baroke.
La asignación de fondos adicionales para incentivar una dieta saludable entre los más jóvenes es alentadora, pero Baroke se pregunta si esa asignación ayudará a resolver uno de los problemas de salud pública más importantes, que es la obesidad infantil.
A nivel mundial, Euromonitor detalla en su informe que la demanda mundial de alimentos frescos superó 2.200 millones de toneladas en 2015, un 2 por ciento más que en 2014.