Antes de mantener una reunión con empresarios de Burgos para hablar de las posibilidades de negocio relacionadas con China, Valencia ha recordado que es un país «muy estable y pujante», que en treinta años ha pasado de ocupar el puesto setenta en la economía mundial a ser la segunda economía y «seguramente en breve será la primera».
En su opinión, en China se ha producido una revolución económica que ha hecho que 600 millones de personas, el doble de la población de toda Europa, se hayan convertido en una clase media con una importante capacidad de consumo.
Además, ha señalado que los expertos indican que en 2020 dos tercios de la clase media del mundo estará en oriente, sobre todo en China.
Valencia ha asegurado que la presencia española en China va creciendo, aunque se trata de un mercado «duro, porque es muy competitivo y cambiante, por lo que obliga a una evolución constante».
Ha detallado que en este momento hay 14.000 empresas españolas que exportan a China y 800 empresas de origen español o fundadas por españoles en China.
En cuanto a los sectores con más presencia española y posibilidades de crecimiento en China ha destacado la automoción, la agroalimentación, especialmente el vino de calidad, los productos químicos y el textil.
De hecho, ha insistido en el crecimiento que ha registrado la empresa textil Zara, que en solo tres años cuenta con 500 establecimientos en China, además de las ventas on line.
Sin embargo, ha reconocido que la revolución económica no ha corrido pareja a la democratización y China no tiene visos de mejorar en este aspecto ni en la libertad de prensa.





















