En Francia, por ejemplo, Lidl se ha dotado de una nueva imagen y ha aumentado su oferta para atraer a nuevos consumidores. Los cambios son más acentuados para la actuación de los discount en Italia, ya que han duplicado su presencia desde el año 2008 y alcanzan el 15 por ciento de la cuota de mercado. Un crecimiento que prevé un aceleramiento con la inminente entrada de Aldi en Italia, probablemente con Hofer, su brazo operativo en las vecinas Austria y Eslovenia, según información de Food web.
Esto explicaría por qué la cadena alemana pretende centrarse en primer lugar en las regiones del norte de Italia y extenderse progresivamente hacia el sur del país. Según Planet Retail, el mercado italiano se presenta como muy atractivo para la cadena, aunque hay una serie de elementos estratégicos. El primero de ellos es la fragmentación del sector de la alimentación en Italia, ya que la presencia de pequeños y medianos comercios se encuentra muy arraigada.
Otro de los factores a tener en cuenta son los precios, ya muchos de ellos siguen la fórmula discount, considerando también la lenta recuperación por la crisis económica. Aparte de los grandes competidores de la gran distribución italianos, como son Eurospin y grupo Lillo, Aldi moverá ficha en Italia con su compatriota Lidl, que ya se posiciona en Italia con 570 puntos de venta y 10 centros de distribución.