El Servicio Fitosanitario del Estado de Costa Rica informó en mayo la suspensión de la importación de aguacate de Australia, España, Ghana, Guatemala, Israel, México, Sudáfrica, Venezuela y el estado de Florida (EE.UU.) por la amenaza de la plaga "avocado sunblotch viroid" (mancha de sol).
Esta decisión ha generado críticas de sectores empresariales que aseguran que la acción creará desabastecimiento de aguacate.
Además, Costa Rica presentó, esta semana, ante el Comité de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias de la OMC, una solicitud de acreditación de sanidad del aguacate mexicano.
Además, el Gobierno de México y Guatemala activaron ante ese mismo Comité de la OMC un mecanismo de preocupación comercial contra Costa Rica por el caso del aguacate.
Ante esta situación la presidenta de Cicomex, Yolanda Fernández, afirmó en un comunicado que mientras el conflicto ante la OMC se resuelve, la cosecha del aguacate nacional y el proveniente de otros mercados se acabará.
Según Fernández, el país no tendrá capacidad de proveer a un mercado que consume 14.000 toneladas anuales de aguacate, de las cuales solo el 20 % es suministrado internamente.
La titular de Cicomex detalló que si la OMC no dicta medidas cautelares para detener el bloqueo, "los problemas que ya se están viendo de sobreprecios de más de 50 % en el aguacate guatemalteco, el contrabando desde Panamá y la explosión de negocios informales, se agravarán".
"Si a la solicitud de Costa Rica se une la demanda de México, y otros países perjudicados por la medida, la duración del proceso podría extenderse y el desabastecimiento sería mayor", expresó el Cicomex en un comunicado de prensa.
La posición de la cámara es seguir "presionando" para evitar que, el aguacate, y cualquier otro producto agrícola, se vea afectado por decisiones relacionadas con "medidas no arancelarias sin criterio legal y que estas puedan convertirse en práctica habitual".