La organización agraria ha informado de que estos datos han sido aportados por el Ministerio del Interior en una respuesta parlamentaria a la que ha tenido acceso La Unió.
En el conjunto estatal se cometieron un total de 21.091 robos y/o hurtos, de los que se esclarecieron 3.739, según esos datos, y la Comunitat Valenciana es, tras Andalucía, donde mayores delitos contra el sector agrario se cometen.
El número de este tipo de delitos descendió el año pasado respecto al anterior aunque en el periodo comprendido entre 2014 y 2010 subieron un 33 por ciento en el conjunto nacional.
En cuanto al número de delitos esclarecidos hay un descenso de 2014 respecto a 2013 aunque en relación a 2010 la cifra sí es bastante relevante, según La Unió.
La organización agraria reconoce que la labor de los equipos ROCA de la Guardia Civil va "poco a poco" siendo positiva, con los medios que tienen, pero aun así la sensación de inseguridad es "todavía preocupante" para los titulares de las explotaciones, y considera que deberían incrementarse los medios y esfuerzos para resolver un mayor número de casos.
El bajo porcentaje de resolución es, añade, un factor que desanima a los agricultores y ganaderos a la hora de denunciar los hechos, lo que puede estar "desvirtuando" también en cierta medida los datos ofrecidos por el Ministerio porque pueden "no estarse denunciando" un número importante de delitos.
La Unió recuerda a los profesionales del sector la importancia de denunciar siempre para evitar que el problema se siga agravando, ya que el bajo índice de resolución de los delitos anima a la reincidencia y genera sensación de impunidad.
Valora la reforma del Código Penal en tramitación, aunque detecta algunas deficiencias, y por ello, ha insistido en la necesidad de crear un registro informatizado de los delitos realizados y su autoría accesible a las fuerzas del orden y juzgados que faciliten su investigación y la detección de la reincidencia.
"España se convierte en uno de los países europeos con un medio rural más inseguro, inseguridad difícil de soportar por los agricultores y ganaderos que ven peligrar el futuro de sus explotaciones y que retrae una parte de la inversión posible en el sector, pendiente de si se pone freno a este grave problema", han manifestado.