Desde Afrucat recuerdan que Rusia no recibirá los 70 millones de kilos que el sector frutícola catalán todavía preveía exportar al mercado ruso en los próximos dos meses y aseguran que serían necesarios 20 millones de euros para poder reequilibrar el mercado sólo para la fruta de hueso.
Según la asociación, 4 de las 5 principales frutas y hortalizas importadas por Rusia son frutas, en este caso manzanas, peras, melocotones y nectarinas. De hecho, el tercer país exportador de la UE es España, por detrás de Lituania y Polonia.
Todavía a la espera de recibir el borrador del reglamento anunciado por el comisario de Agricultura de la CE, Dacian Ciolos, Afrucat considera como insuficientes las medidas propuestas desde Europa para hacer frente al previsible hundimiento del mercado.
"Nosotros pedíamos medidas universales, suficientes y sin límites y la Comisión continúa limitando el volumen a retirar cuando lo lógico sería que fuese el propio mercado el que marcase el límite", ha afirmado Simón, que ha añadido.
"No tenemos ningún socio que prefiera retirar antes que servir a un cliente, pero lo que no podemos permitir es que decisiones políticas pongan en jaque a todo un sector estratégico como es el agroalimentario. Si Europa ha provocado el veto ruso, Europa debe asumir el coste de sus decisiones", ha recalcado Simón.
Mientras se suceden las reuniones en los despachos, llegan las ofertas "indecentes", según Afrucat, de los operadores centroeuropeos que ofrecen 40 céntimos de euro por kilo de producto puesto en destino e intentan retrasar al máximo los pedidos a la espera de que bajen los precios.
El director de Afrucat ha añadido: "Todo lo que sale de nuestras centrales por debajo de los 65 céntimos de euro representa una pérdida para el fruticultor".
Algunas medidas para ayudar a los productores de melocotón y nectarina podrían ser el incremento del límite de retiradas para las OPFH del 5 al 10% de su facturación, la posibilidad que los productores que no pertenecen a una OPFH puedan retirar con cobrando la mitad del precio de retirada, dotar de fondos adicionales para la promoción o la aplicación de las medidas de forma retroactiva.
Según Afrucat, la situación puede volverse dramática este otoño cuando Polonia, primer país suministrador de Rusia, ponga en el mercado su cosecha récord de manzana y las peras belgas y holandesas tampoco puedan exportarse.
En este sentido, la asociación remarca la necesidad de que las medidas no se limiten a la fruta de hueso y que se amplíen para la fruta de pepita que, sin duda, se verá afectada por el veto ruso.