El dinero fue destinado a obras de modernización de regadíos para 3.700 comuneros en 2.630 hectáreas de la Vega Media, siendo pagados 1,5 millones del total, con lo que queda pendiente de pago el 75 por ciento.
"Las reuniones celebradas hasta ahora han terminado sin acuerdo ante la intransigente actitud de los dirigentes de los regantes, que no están dispuestos a atender los compromisos contraídos con anterioridad", añade el anuncio publicitario.
Los regantes, que se vienen manifestado desde el pasado lunes frente a la Sede de Cajamar de Murcia, en su página de facebook, advierte que el pasado 10 de abril fue notificado el decreto de embargo de cuentas bancarias, derechos de agua y propiedades del Heredamiento, al amparo de la ejecución de títulos no judiciales llevada a cabo por Cajamar, "lo que, de llevarse a la práctica, supondrá la desaparición de la agricultura en Archena, Lorquí y Molina de Segura".
Añaden que uno de los préstamos que ahora se ejecutan era finalista "y destinado única y exclusivamente a realizar unas obras que nunca se realizaron".
El Heredamiento ha presentado una querella en vía penal contra Cajamar hace más de un año en el Juzgado de instrucción número 5 sobre este asunto.