La consejera de Agricultura del Gobierno de Canarias, Pilar Merino, anunció que hoy ha remitido una carta al Ministerio de Agricultura para que se suspendan de forma temporal las importaciones de tomate desde la Península, hasta que se controle una nueva plaga que de momento no se padece en las islas.
Pilar Merino hizo este anuncio durante una intervención en el pleno del Parlamento regional, y afirmó que si esta plaga, denominada «tuta absoluta», afectara al tomate canario, supondría un grave perjuicio para un sector que ya sufre otras plagas importadas.
La consejera dijo que en Canarias hay grandes problemas en la inspección de productos vegetales, ya que entran por puertos y aeropuertos, donde no hay puntos de control.
«Las inspecciones se hacen en lugares que no reúnen las condiciones de la normativa nacional», un almacén privado en Tenerife y un laboratorio animal en Gran Canaria, denunció.
La diputada de CC Belén Allende, que había preguntado a la consejera por este asunto, reclamó las competencias para Canarias de la sanidad exterior, por la necesidad de evitar que continuamente entren plagas que afectan a la agricultura de las islas.