Europa ya cuenta con muchos productores de fresa en el mercado. Marruecos, Israel, Egipto y España ven crecer sus fresas en pleno invierno, en plena competencia con la fresa del Sur de Italia. Italia produce entre mayo y octubre y «tenemos que lidiar con la oferta de Bélgica, Holanda y Alemania en verano y con la del Mediterráneo en verano», señala Lorenzo Giacomelli, gerente de la firma SantOrsola al portal Freshplaza.
El ejecutivo afirma que la fresa italiana ha dejado de ser competitiva por el «aumento de jugadores en el sector en los últimos años, además de nuevas producciones extranjeras».
Los exportadores italianos señalan que los precios de la fresa han dejado de ser rentables y por este motivo, esta empresa, fundada en 1972, ha optado por trabajar con variedades con sabor como Elsanta. Esta variedad es la más popular con más de 1.200 socios crecientes. Su fruto es bueno con «un excelente sabor, olor, color y vida útil, aunque tiene una productividad ligeramente inferior que otras variedades», señalan desde la empresa