Un nuevo estudio encargado por el Departamento de Agricultura de la Comisión Europea (DG AGRI) confirma el papel protagonista de la agricultura ecológica en la contribución a los objetivos climáticos.
Según el estudio encargado por el Departamento de Agricultura de la Comisión Europea (DG AGRI), la reducción y el secuestro de las emisiones de gases de efecto invernadero, la conversión a la agricultura ecológica, la rotación o diversificación de cultivos y la expansión de los cultivos de cobertura, estas tres prácticas contribuyen al 78 % de un potencial de mitigación estimado en hasta 31 millones de toneladas equivalentes de CO2 al año, principalmente en secuestro de carbono (22 millones de toneladas) y reducción de emisiones del suelo (9 millones de toneladas).
Además, se calcula que las ayudas nacionales para el mantenimiento de la agricultura ecológica protegen más de la mitad (54 %) de los sumideros de carbono existentes, estimados en 29 millones de toneladas de CO2-equivalente anuales en los 18 Estados miembros analizados en el estudio.
Según Eric Gall, director adjunto de IFOAM Organics Europe: «Este estudio demuestra que, además de proteger la salud de los agricultores, los recursos hídricos y la biodiversidad mediante la reducción del uso de pesticidas sintéticos, el desarrollo de la agricultura ecológica también es esencial para reducir las emisiones de la agricultura y aumentar el secuestro de carbono del suelo».
Y añadió: «Dados los numerosos beneficios que aporta, la agricultura ecológica debería tener un papel más destacado en la próxima PAC y en la futura visión de la agricultura y la alimentación».