Según ha informado el departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural (DAAM), Alcarràs ha acogido hoy una reunión para evaluar los daños de la fuerte tormenta, que ha dejado muchas fincas afectadas en esta localidad.
En concreto, la tormenta provocó daños tanto por la piedra que la acompañó como por el viento, que arrancó árboles jóvenes y malogró ramas y sistemas de riego, entre otros daños. Así pues, aunque el granizo no fue de grandes dimensiones, la intensa tromba de agua y el fuerte viento potenciaron su efecto.
Los daños han sido de hasta un 30% en la zona menos afectada de Alcarràs (770 hectáreas de fruta dulce, 200 de cereales y 310 de forrajes) y de Gimenells i Pla de la Font (65 hectáreas de fruta dulce, 190 de cereales , 55 de frutos secos y 310 de forrajes); mientras que la afectación se sitúa entre el 80 y 100% en las zona más afectada del municipio de Alcarràs (225 es de fruta dulce, 150 de cereales y 320 de forrajes).
Las fuertes trombas de agua también ocasionaron afectaciones graves en caminos del municipio de Biosca, en una zona de unas 1.500 hectáreas al norte de la población.
El director general de Agricultura y Ganaderia, Miquel Molins, ha explicado tras la reunión en Alcarràs que el Departmaneto «priorizará las instalaciones de redes antipiedra y las fórmulas para facilitar su financiación vía el nuevo Programa de Desarrollo Rural (PDR) que se iniciará en 2014, entre otros instrumentos como los Planes de Mejora, para garantizar la producción y el abastecimiento de los mercados, ya que es un sistema que funciona».
Por otro lado, el director general también ha reivindicado que la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (ENESA) no reduzca la subvención a los seguros el año próximo, cómo ha pasado en el caso de la recogida de cadáveres, de manera que los agricultores no se replanteen si asegurar o no.
Por su parte, el alcalde de Alcarràs, Miquel Serra, también ha insistido en la necesidad de instalar redes antipiedra como único sistema con que se ha demostrado que se pueden evitar los daños de las granizadas en la agricultura y, por esto, se ha comprometido a priorizar las ayudas para su instalación.
