La patata es el cuarto alimento más consumido en el mundo de ahí su utilidad como herramienta para combatir el hambre en el planeta. En un acto con motivo del Día Mundial de la Alimentación, el presidente de la Asamblea General, Srgjan Kerim, advirtió la «humilde patata tiene un papel que no se puede subestimar».
Kerim observó que las actividades que se realizarán a lo largo de este año permitirán «centrar la atención global en esta fuente principal de energía para más de 1.000 millones de los más pobres del mundo».
El mundo produce anualmente más de 300 millones de toneladas de patatas, más de la mitad de las cuales se cultivan en países en desarrollo, y su comercialización en 2006 generó 6.000 millones de dólares, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).