Según ha informado Embrapa, la nueva variedad es tolerante al cancro de los cítricos, la mancha marrón y al tizón. Es un cultivo muy productivo que puede alcanzar entre 25-30 toneladas por hectárea.
En Rio Grande du Sol la maduración de los frutos es tardía y su cosecha se lleva a cabo entre octubre y diciembre, pudiendo adelantarse o retrasarse dependiendo de las temperaturas medias de la región.
El investigador Roberto Pedroso de Oliveira señaló que la fruta en verde puede ser utilizada para la extracción de aceites esenciales y en maduro para la producción de zumo o consumo en fresco.
«El fruto tiene un peso aproximado de 160 gramos», detalló Pedroso.
Su sabor es agradable, con un contenido de azúcar de 12 grados brix y presenta menores costos de tratamiento.





















