La Comisión Europea (CE) exigió hoy a España la devolución a las arcas comunitarias de más de un millón y medio de euros indebidamente gastados, procedentes del presupuesto agrícola de la UE, informaron fuentes comunitarias.
El Ejecutivo comunitario impuso hoy a 11 países de la UE la devolución de un total de 145,22 millones de euros por irregularidades en la gestión del dinero de la Política Agrícola Común (PAC), de los cuales España reembolsará 1,55 millones.
Según esta decisión, España debería reembolsar 2,53 millones de euros por irregularidades en el gasto agrícola, pero a esta cantidad hay que restarle 975.554 euros por la anulación de una multa anterior impuesta al sector de cítricos en Andalucía, con lo cual la sanción ascenderá a 1,55 millones de euros.
De esta sanción, España devolverá 1,35 millones por controles poco fiables de las entregas de leche; 550.846 euros por no aplicar en Cataluña multas ante la negativa de agricultores a los controles; 420.000 en retrasos del control de ayudas al sector vacuno y 210.000 por fallos en el almacenamiento público de mantequilla.
Por el contrario, la decisión de hoy hace efectiva la anulación parcial, por parte del Tribunal de Primera Instancia de la UE, de una multa anterior que la CE aplicó al sector de cítricos para industria, en Andalucía, por 975.554 euros.
La CE reclamó hoy la devolución de fondos a Italia, Francia, Suecia, Bélgica, Alemania, Dinamarca, Irlanda, Holanda, Gran Bretaña y Portugal.
Las multas más altas fueron para Francia, cerca de 50 millones de euros e Italia, por un valor de 83,4 millones de euros.
La corrección financiara de hoy es una de las revisiones que periódicamente hace Bruselas del gasto agrícola, con el fin de recuperar el dinero indebidamente gastado de la PAC, como consecuencia del incumplimiento de las normas o por falta de control.
La comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel manifestó, en un comunicado, que la CE «ha trabajado duro para gestionar mejor los gastos agrícolas».
«El dinero del contribuyente está en juego y nuestro deber es garantizar un control eficaz de su utilización; hemos hecho progresos significativos en la calidad de los controles y estamos dispuestos a continuarlos», remarcó Fischer Boel.