Asaja Alicante ya mostraba a mediados de septiembre su preocupación porque los impagos de las ayudas agroambientales, entre las que figuran las del pedrisco para el Valle de las Uvas, están causando «serios problemas» en las explotaciones de la provincia.
Los productores todavía no han percibido las subvenciones resueltas favorablemente en 2011 y anuncian que, de no cobrarse con urgencia, servicios concretos como el del asesoramiento de explotaciones estarán condenados al fracaso absoluto.
Por eso se pregunta el presidente de Asaja que «¿Cómo pretenden los políticos subir impuestos, encarecerlo todo y no ser capaces de cumplir con sus obligaciones? No pueden pedir lo que ellos son incapaces de hacer. Tiene que haber más responsabilidad política y quien gobierne debe cumplir sus compromisos. De lo contrario, la Administración está actuando como las empresas fraudulentas que dan cheques sin fondos y que no entregan lo pactado al eslabón más débil de la cadena alimenticia, que es el productor». Y apostilla Eladio Aniorte «están amargando a los agricultores. Después de trabajar meses para resolver trámites, invertir mucho tiempo y esfuerzo, gastar sumas elevadas de dinero para cumplir con los requisitos y contratar técnicos resulta que no reciben el dinero de la ayuda que les han concedido. No hay derecho y no me vale la excusa de que no hay dinero porque llevan más de nueve meses haciendo recortes y más recortes





















