A su llegada a un Consejo de Ministros de Agricultura de la UE donde se hablará del tema, el ministro indicó que limitar las prácticas a las posibilidades que plantea Bruselas «puede condicionar mucho la actuación de las comunidades autónomas e impedir que estas puedan agotar los fondos que tienen a su disposición». Por ello, señaló, España considera que «hay que incrementar las posibilidades de destinos medioambientales de los fondos de desarrollo rural», incorporando una política ambiciosa de forestación y medidas para el cumplimiento de la red Natura 2000. Asimismo, se deberían poder utilizar en la puesta en marcha de «los compromisos medioambientales que se derivan de la Directiva Aguas», consideró el ministro.
«Si se hacen más acciones, podríamos estar en condiciones de asumir esos porcentajes. Si no, nos parecería absolutamente excesivo», indicó. Arias Cañete explicó asimismo que España tiene «importantes problemas» con las propuestas de desarrollo rural que incluye la reforma de la Política Agrícola Común (PAC).





















